Hoy tenemos el placer de conversar con Aixa Valfiguer, autora del poemario “Póker con las estrellas”, una obra que ha captado la atención de críticos y lectores por su poderosa imaginería y su aguda crítica social. En este libro, Valfiguer nos sumerge en un mundo distópico donde la libertad es un sueño prohibido y las almas luchan por encontrar su lugar en una sociedad opresiva.
A través de sus versos, divididos en secciones simbólicas como “Hombre”, “Víbora” y “Paloma”, la autora explora temas universales como la opresión, la búsqueda de la identidad y la resistencia del espíritu humano. Su estilo único, que combina imágenes surrealistas con una crítica social aguda, ha sido comparado con el de poetas contemporáneos reconocidos, aunque Valfiguer logra una voz distintiva propia.
En esta entrevista, profundizaremos en el proceso creativo detrás de “Póker con las estrellas”, exploraremos las influencias literarias de Valfiguer y discutiremos su visión sobre el papel de la poesía en la sociedad actual. Sin más preámbulos, demos inicio a nuestra conversación con esta prometedora voz de la poesía contemporánea.
¿Qué le inspiró a escribir “Póker con las estrellas”?
Es una idea que llevaba en mi cabeza muchos años, pero nunca se completaba. Recuerdo que se empezó a formar una idea sólida de lo que quería mientras paseaba a mi perra hace tres años (que en paz descanse), y se me vino el verso “Las prostitutas claman justicia antes las fauces de los cocodrilos”. Ese fue el comienzo de todo. Me gustó tanto ese verso, tan propio de mí y que no me había atrevido hasta entonces de escribir, que todo lo demás surgió solo. Se creó un universo entero de bestias delante de mis narices y hasta hoy sigo viviendo en él.
El libro está dividido en secciones principales: “Hombre” y varios animales ¿Puede explicarnos el significado detrás de esta estructura?
Esta obra cuenta una historia algo complicada de explicar tan solo a través de versos, ya que me importaba más que se entendiera a que fuera simplemente bello a la vista de quien lo leyera, por lo que decidí manejar un esquema más narrativo para contar la historia del protagonista. En las primeras secciones presento al protagonista, un esclavo que no sabe qué hacer para escapar de allí, y el mundo tan insólito que le rodea. Según avanza su historia, se van contando los acontecimientos principales que le hacen evolucionar como ser hasta descubrir y conseguir su sueño, con todo lo que tuvo que sacrificar por el camino.
En su obra, utiliza una rica simbología animal. ¿Por qué eligió estos símbolos específicos y qué representan para usted?
Son bestias que usamos en nuestro día a día para identificar las actitudes de algunas personas como esos animales. Además, cuánto más descubres de ellos, más detalles puedes detectar en la obra y compararlos con tu propia situación. No voy a definir qué significa cada animal, puesto que es algo que va a cambiar con cada lector que lo lea.
La distopía es un tema central en su libro. ¿Qué mensaje quiere transmitir a través de este mundo sombrío que ha creado?
El mundo es sombrío, ciertamente. El mundo real también lo es. Cumplimos roles, buscamos qué hacer con nuestras vidas, seguimos consejos cuando nos perdemos… Siempre buscamos metas que alcanzar. El mensaje de la obra es el mismo que debemos tener presente en nuestra vida: hay que observar el mundo porque somos parte de ello, pero es nuestra decisión cómo nos comportamos ante ello y qué es lo que queremos ser en él.
¿Cómo describiría su estilo poético y qué autores han influido en su escritura?
Mi estilo se ha ido forjando a lo largo de los años. Llevo escribiendo poesía desde, por lo menos, los siete años de edad. Adoro toda clase de lírica que se me ponga delante, pero he de destacar dos autores en los que me refugio mucho y ellos son Bécquer y Lorca. Siempre seguiré escribiendo en tanto que pueda (porque siempre querré) y mi estilo fluye, al igual que todo en este mundo, pero tengo la sensación de que esta es la línea que tendrá. Es una poesía bastante directa y simbólica, con un ritmo que no se deja llevar por la estructura clásica, pero la cadencia está ahí, capaz de manejar la velocidad en la que debe leerse. Me gusta la poesía que escribo, creo que tiene un toque diferente a lo que suelo leer, pero siempre seguiré intentando ser mejor poeta.
En “Póker con las estrellas”, aborda temas como la opresión y la búsqueda de la libertad. ¿Cómo cree que estos temas resuenan en la sociedad actual?
No hace falta ir muy lejos para ver su cercanía con la realidad. Son temas atemporales, muy marcados a lo largo de la historia. En estos tiempos, si te sientas a leer las noticias terminas resoplando con una mueca de molestia, sabiendo que las cosas no han cambiado por mucho que vivamos en esta sociedad moderna. Estamos rodeados de guerra, tratados, corrupción, inmigrantes y refugiados, noticias falsas y entretenimiento a rabiar para olvidar lo que nos perdemos en la rutina. Puede que no vayamos a liberar naciones enteras, pero podemos ser libres en nuestro propio concepto de libertad, para nosotros mismos, sentirnos libres aun en el mundo en el que nos hallamos.
¿Qué papel cree que juega la poesía en el mundo contemporáneo?
La poesía nunca va a morir, aunque se le dé menos importancia en el presente de lo que tuvo en el pasado. La poesía tiene un gran poder de transformación, se convierte en música, en discursos, en declaraciones, en confesiones, se mezcla con otros géneros como la narrativa y el teatro. Siempre está allí, y siempre estará. Mientras, los poetas seguiremos escribiendo para demostrarlo.
¿Cómo equilibra la necesidad de expresión artística con la accesibilidad para el lector en su poesía?
Considero que mi poesía es accesible para todos los lectores. El mensaje es claro, es mi alma quien la escribe, quizá de allí su forma tan peculiar. El arte forma parte del ser humano. Me gustaría algún día poder dedicarme de lleno al arte en todas sus facetas, así como disfrutarla.
¿Qué consejo le daría a los jóvenes poetas que están empezando a escribir?
No hay un camino pactado, no hay guías, no hay obligaciones. Si quieres escribir, escribe, y nunca dejes de hacerlo. Hay que leer mucho para poder escribir, es cierto, pero también hay que forjar un espíritu de hierro para poder avanzar en esto. a igual cuantas veces quieras rendirte, cuantos obstáculos tengas por delante… Todo pasa, nada dura. Sigue escribiendo y verás como el camino que creas se va allanando solo.
¿Cómo ve el futuro de la poesía en la era digital?
Todo evoluciona, la poesía también. En las redes sociales hay varios ejemplos de ello, creando video poemas, recitando en reels, compartiendo posts… La poesía está ahí, mostrándose ante el mundo. Siempre es mejor que un libro de poemas en una biblioteca llenándose de polvo con los años porque ya no la leen.
¿Hay algún poema o sección del libro que tenga un significado especial para usted?
Todas las secciones tienen un gran significado para mí, pero destaco la primera, la tercera y la última. La primera, porque soy la primera que se identifica con aquel esclavo de ve el cielo negro con un cafe en la mano, sabiendo que está cavando su tumba sin haber vivido lo suficiente. El tercero, porque expresa toda la emoción de descubrir un sueño escondido y la esperanza de poder conseguirlo en algún momento de nuestra vida. El final, obviamente, el final es todo aquello por lo que se ha luchado, es mi voz más frágil y, al mismo tiempo, la que más fuerza posee. Toda mi frustración, la melancolía, el miedo, la euforia, la esperanza, los sueños y deseos están plasmados en los versos de este personaje a lo largo de toda la obra.
¿Cómo ha sido su proceso creativo al escribir este libro?
He tardado unos tres años en poder convertir en palabras todo el universo que había creado. Cada personaje tiene su propia vida, sus propias metas, sus propios miedos… y yo quería dedicarles todo el tiempo que hiciera falta para poder mostrarlo. Los considero tan reales como tú y yo, y se merecen más que un verso perdido en una maraña de ideas revueltas.
¿Qué espera que los lectores se lleven después de leer “Póker con las estrellas”?
Solo ellos sabrán qué van a encontrar en esta obra. Es diferente para cada persona. Son vidas de bestias plasmadas en un libro, pero son vidas. Quizás se identifiquen con el hombre, quizás con la víbora o la paloma. Tal vez defiendan la postura de los hipopótamos ante el mundo y les moleste que las aves anden rondando donde no las llaman. Me gustaría que vivieran este mundo tan extraño y familiar, y que el mensaje que transmite no les pase desapercibido. Podemos conseguir todo lo que nos propongamos, por muy difícil que sea. Solo debemos parar un momento y desplegar las plumas.
¿Tiene planes para futuros proyectos literarios? ¿Puede adelantarnos algo?
He terminado un nuevo poemario, llamado Arde, que sigue el mismo camino que Poker con las estrellas, profundizando en algunos temas con un tono más lírico.
Después de esto, me tomaré un descanso. Escribo por gusto, porque me sale del corazón plasmar lo que siento y quiero que sea así siempre. No quiero verme forzada a escribir para alguien o sobre algo en concreto. Tengo varios proyectos en marcha, desde hace años, y les daré todo el que merecen.