Pero…

«Yo apoyo la huelga de basuras», dicen, «pero…» y pongan ustedes lo que quieran en los puntos suspensivos, porque lo que sigue al «pero», más que una matización es una negación en toda regla de la primera parte de la frase. 
Y lo mismo ocurre cuando hay huelga en el metro (que todos la apoyan, pero…), o en Sanidad o en cualquier otra cosa. Somos progresistas, claro, cómo no, pero queremos que se respeten también nuestros derechos. Sobre todo, nuestros derechos como consumidores, que esos los tenemos muy bien aprendido. 
Y como hasta los autoproclamados progresistas piensan así, el gobierno ha tomado nota y está dando ya los primeros pasos para regular (es decir, controlar) el derecho a huelga. Y la progresía aplaudirá, claro, porque todos apoyamos las huelgas, pero…
Esperemos, ahora en serio, que alguien quede con el juicio sano en el Tribunal Constitucional y les recuerde a los señores legisladores que en los derechos hay una jerarquía y que mientras el de huelga es fundamental, el derecho a ir a trabajar en Metro o a ver las calles limpias ni siquiera existe, a no ser como contrato usuario/empresa. En todo caso, un régimen muy inferior.
Aunque esperar algo de juicio según anda el país, quizás sea mucho esperar.

Pero…

«Yo apoyo la huelga de basuras», dicen, «pero…» y pongan ustedes lo que quieran en los puntos suspensivos, porque lo que sigue al «pero», más que una matización es una negación en toda regla de la primera parte de la frase. 
Y lo mismo ocurre cuando hay huelga en el metro (que todos la apoyan, pero…), o en Sanidad o en cualquier otra cosa. Somos progresistas, claro, cómo no, pero queremos que se respeten también nuestros derechos. Sobre todo, nuestros derechos como consumidores, que esos los tenemos muy bien aprendido. 
Y como hasta los autoproclamados progresistas piensan así, el gobierno ha tomado nota y está dando ya los primeros pasos para regular (es decir, controlar) el derecho a huelga. Y la progresía aplaudirá, claro, porque todos apoyamos las huelgas, pero…
Esperemos, ahora en serio, que alguien quede con el juicio sano en el Tribunal Constitucional y les recuerde a los señores legisladores que en los derechos hay una jerarquía y que mientras el de huelga es fundamental, el derecho a ir a trabajar en Metro o a ver las calles limpias ni siquiera existe, a no ser como contrato usuario/empresa. En todo caso, un régimen muy inferior.
Aunque esperar algo de juicio según anda el país, quizás sea mucho esperar.