escritora

Sin rumbo

 

La gente camina con rumbo,

el mío lo perdí hace tiempo

cuando te cruzaste en mi camino

y me embriagaste de deseo.

Siento perder el sentido

noto cómo se convierten los sueños

en pesadillas de tu ausencia

en anhelos de tus besos…

y se pierde mi mirada

hacia un día en que te tuve

y se duele mi corazón

de quererte como nunca pude.

Perdida

 

En ti me perdí una noche,

en tus brazos me desvanecí,

en tus labios me dormía

y de tus besos me invadí.

En ti me perdí esa noche

y con tu recuerdo… viví.

Yo quiero

 

Quiero gritar al viento tu nombre

sin que nada calle mis suspiros,

quiero correr a tu lado y verte

sin que nadie frene mis delirios.

Quiero tus ojos y tus labios,

que colmen los míos de besos.

Quiero gritar al viento tu nombre

y susurrarte al oído un te quiero.

En el horizonte

 

En el horizonte vi tu sonrisa,

despidiéndome desde el invierno

y tu aliento dejó un susurro,

y en mis ojos, tus recuerdos.

Para el viaje que emprendiste,

solo, sin nada más que tu cuerpo

yo me quedé con tu alma impregnada de deseos.

Y el futuro se perdió en la niebla,

el pasado se agolpa en mi mente

y el presente me aboca a sentirte

y, por siempre, a quererte.

 

Pero no estás aquí

y en mí siento tu ausencia,

y en ese horizonte se perdió tu sonrisa,

y el verano me trajo… tu esencia.

A colores

 

Tras de mí quedaron azules,

casi negros, mil momentos,

con pinceladas de amarillo y verde

en algún cosquilleo del tiempo.

Tras de mí, quedaron dos soles

y cien nubes, que iban y venían… con el viento.