«Literatura no autista. literatura con minúsculas, diálogo y fusión y esperma y sangre y bichos con patas. Literatura hallada en los contenedores de basura y en las colas del paro y en la vida que se reproduce. Literatura de la vida. Somos muchos más y no tenemos portadas. Pero eso también está cambiando. O no, pero qué nos importa«.
Así acaba un magnífico artículo que podéis leer aquí: http://blogs.zemos98.org/carolinkfingers/2012/05/20/autismo-cultural/