Pletóricamente pletórico

Enfrentarse a la mañana con determinación, audacia, amor, dulzura e ironía no es tan sencillo. Paco Bello lo hace magistralmente agazapado tras el despertador de “Buenos días, Don Pletórico” Edit. Poesía eres tu, 2009.
Arranca el árbol para contarnos lo que sus raíces esconden, luego descubre que se lo ha cargado y acude a toda prisa a plantarlo de nuevo, o sea, a replantarlo, y en el mientras tanto aquí nos tiene en esa tensión, en esa magia que cada uno de sus poemas mantiene hasta el desenlace. Algo al alcance de muy pocos.
Otras veces no llega a esos extremos, le basta con andarse por las ramas para ir al grano, bueno, al fruto o a la flor que desea mostrarnos.
Todo ello con la compleja sencillez de la palabra exacta, a veces cotidiana, a veces recuperada, reciclada o reencarnada, como seudo metáforas o máscaras a cara descubierta.
Pero la clave está en la genialidad. No le basta a este cantautor acariciar la guitarra y regalar melodías e historias, cuentos y canciones. Con su poesía regala sensaciones, colores y sonrisas. Y, cuando lo desea, los pensamientos y sentimientos más profundos a toda pastilla, a bote pronto, a contrapelo y siempre cara a cara.
Fresco y hondo. Como un manantial Don Pletórico nos llama a vivir y a leer para contarlo.

Jrc

Pletóricamente pletórico

Enfrentarse a la mañana con determinación, audacia, amor, dulzura e ironía no es tan sencillo. Paco Bello lo hace magistralmente agazapado tras el despertador de “Buenos días, Don Pletórico” Edit. Poesía eres tu, 2009.
Arranca el árbol para contarnos lo que sus raíces esconden, luego descubre que se lo ha cargado y acude a toda prisa a plantarlo de nuevo, o sea, a replantarlo, y en el mientras tanto aquí nos tiene en esa tensión, en esa magia que cada uno de sus poemas mantiene hasta el desenlace. Algo al alcance de muy pocos.
Otras veces no llega a esos extremos, le basta con andarse por las ramas para ir al grano, bueno, al fruto o a la flor que desea mostrarnos.
Todo ello con la compleja sencillez de la palabra exacta, a veces cotidiana, a veces recuperada, reciclada o reencarnada, como seudo metáforas o máscaras a cara descubierta.
Pero la clave está en la genialidad. No le basta a este cantautor acariciar la guitarra y regalar melodías e historias, cuentos y canciones. Con su poesía regala sensaciones, colores y sonrisas. Y, cuando lo desea, los pensamientos y sentimientos más profundos a toda pastilla, a bote pronto, a contrapelo y siempre cara a cara.
Fresco y hondo. Como un manantial Don Pletórico nos llama a vivir y a leer para contarlo.

Jrc

Pletóricamente pletórico

Enfrentarse a la mañana con determinación, audacia, amor, dulzura e ironía no es tan sencillo. Paco Bello lo hace magistralmente agazapado tras el despertador de “Buenos días, Don Pletórico” Edit. Poesía eres tu, 2009.Arranca el árbol para c…