Quiero dedicar este libro.
Al cariño de mi familia.
A mi mujer a mis tres hijos.
A los amigos del día a día.
Mi familia de San Pedro.
Y a mi tierra que tanto quiero.
El puerto de Santa Maria.
Pasando por la ciudad de Marbella.
Y a mis vecinos de Nueva Andalucía.
Recuerdos de mi niñez.
Con mi madre y con mi abuela.
Mis hermanos a mi lado.
Que siempre me han apoyado.
Con cariño y llenos de humor.
!!Que buenos momentos pasados¡¡
Quiero agradecer también.
A mis tíos, cuñadas y cuñados.
A mis primos y sobrinos.
Que siempre estuvieron a mi lado.
Y a mis segundos padres mis suegros.
Que tanta estima me tienen.
Y nunca me han abandonado.
Y qué digo de mi padre.
Hombre en su vida descarriado.
Abuelo de mis queridos hijos.
Causa y pena de mis llantos.
Marido de mi amada madre.
Pero de su corazón apartado.
Cuántos años te perdiste.
De alegrías penas y llantos.
Y cuánto daño nos hiciste.
No te preocupes padre.
Que de la vida que tú elegiste.
Y de tantos tantos pecados.
Tu familia que te quiere.
Y tu hijo que te ha perdonado.
Porque lo cuenta es el presente.
Y ya no se vuelve al pasado.
En esta hoja de papel en blanco.
Quiero plasmar mi querer.
A ti mi querida esposa.
Figura de dulce mujer.
Hay tantas cosas, tantas cosas.
Que aquí escribir no podré.
Perdona si no lo consigo.
Pero hay mucho que decir.
Quédate aquí conmigo.
Estos versos te los dedico.
Con mi alma y mi sentir.
Fuiste la inspiración en mi adolescencia.
Ahora mi vida, mi amor, mi excelencia.
No sé qué haría sin ti.
Cuando a mi vera no estuvieras.
Hijos me diste tres.
Alejandro, Daniel y Noelia.
Que vinieron del querer.
Que crecieron en nuestra siembra.
Ni tú ni yo lo sabemos.
Pero esto que digo es tan grande.
Hemos tenido problemas.
Y los sacamos adelante.
Con fe, cariño y paciencia.
Recuerdo en aquella época.
que a lo lejos te vi.
Por los rincones te buscaba.
Me enamoré de ti.
Y contigo me casaba.
Hasta que llegue el fin.
Y la muerte nos separara.
Mi niña no duerme.
Mi niña se queja.
A ver si esta nana.
Sus males aleja.
Si pido a la luna.
Su mágico manto.
Cubriría a mi niña.
Y callaría su llanto.
Ea, la ea ea.
Lleva madre a la niña.
A la gitana canastera.
Y que me la meza en su cestita de enea.
Ea esta nana, ea esta nana.
Llévatela madre junto a la ventana.
Y mécela con el fresco aire que recorre la mañana.
Ea mi niña, ea mi niña.
Llévala madre junto a la campiña.
Y mécela dócil, como uva en la viña.
Ea mi vida, ea mi vida.
Que, con esta nana, que yo canto a mi niña.
Con los angelitos del cielo se queda dormida.
Mi niña duerme en su humilde cuna.
A ver si soñando, la mece la luna.
Y la mar de olas con su manto blanco de espuma.
¿Qué es poesía?
Aquí me siento frustrado.
En el fondo del alma afligido.
Me dirijo a quien sabe tanto
Y al que no lo tiene entendido.
Al que habla sin tener razón.
La poesía no es arte aprendido.
Es como un mágico encanto.
Y sale del fondo del corazón.
Porque qué sería sin ella.
El encanto de cualquier canción.
Una balada, un fandango o bulería.
La música de un precioso tango.
Sin rima, sin verso o poesía.
Que te llena de emoción.
Cuando el poeta o cantante recita.
Y te cuenta historias de la vida
Con sus penas y alegrías.
Quiero que os imaginéis.
Una afamada opera, una zarzuela.
Solo escuchad su música y melodía.
Sin su historia, sin su letra.
En vuestras mentes afinadas.
Comprobad al final lo que queda.
No hay magia ni emoción, no hay nada.
Una obra vacía y hueca.
Porque la esencia le falta.
Es el arte hecho palabra.
Pero no son las palabras mías.
Lo dicen los grandes maestros.
El poeta nace poeta.
Y sus frases moldea y forja.
Llamando a su obra poesía.